¿En qué consiste?

El componente emocional juega un papel crucial en la predisposición al sobrepeso o la obesidad. El tratamiento psicológico aporta soluciones y mejoras a los posibles problemas del paciente.

  • Tratamiento y acompañamiento psicológico.
  • Identificar la existencia de problemas de trastorno del comportamiento alimentario (anorexia, bulimia nerviosa, atracones…).
  • La obesidad como causa o consecuencia de otros desajustes.
  • Ajustar la relación comida-cuerpo para trabajar en la autoestima y en la satisfacción personal.
  • Trabajar la motivación y el control para lograr el mantenimiento de unos nuevos hábitos saludables de estilo de vida.

Esta terapia de apoyo ayuda a los pacientes a tomar consciencia de los patrones de comportamiento erróneos, lograr una mayor adaptabilidad e involucración con el tratamiento médico y nutricional, dar un giro de 90 grados a la relación con los alimentos y aprender estrategias para controlar las emociones y disfrutar de la comida de forma saludable.

El psicólogo clínico es también el encargado de valorar si los pacientes son aptos para la cirugía de la obesidad. Existen algunas causas que imposibilitan la intervención quirúrgica:

  • Toxicomanía (alcohol o drogas).
  • Enfermedades psiquiátricas mayores (esquizofrenia, neurosis, psicosis…).
  • Retraso mental.
  • Trastornos del comportamiento alimentario(anorexia, bulimia…).
  • Incapacidad para comprender los mecanismos para la pérdida de peso.