La fibrilación auricular (FA) es una arritmia cardíaca común que se caracteriza por un ritmo irregular y, a menudo, acelerado del corazón. Esta condición se produce cuando las señales eléctricas en las aurículas (las cámaras superiores del corazón) se vuelven caóticas, lo que provoca que estas cámaras latan de manera descoordinada y rápida. Como resultado, la capacidad del corazón para bombear sangre de manera eficiente se ve afectada.
La FA afecta a millones de personas en todo el mundo. Se estima que su prevalencia es del 2%, alcanzando el 18% en pacientes mayores de 85 años. Esta enfermedad es especialmente relevante porque puede incrementar hasta 3.5 veces la mortalidad debido a complicaciones como insuficiencia cardíaca, ictus 
isquémicos, deterioro cognitivo, depresión y disminución de la capacidad funcional de los pacientes.
La orejuela izquierda es una pequeña cavidad en forma de bolsa situada en la parte superior de la aurícula izquierda del corazón. Su función es actuar como un reservorio para la sangre que fluye hacia las aurículas. Cuando el corazón no late de manera eficiente, como en el caso de los pacientes con FA, puede haber un estancamiento de la sangre en la orejuela izquierda, lo que favorece la formación de coágulos sanguíneos. Estos coágulos pueden desplazarse y causar accidentes cerebrovasculares (ictus) y otras complicaciones tromboembólicas.
El tratamiento de la fibrilación auricular debe abordar dos aspectos fundamentales: el control de la arritmia y la prevención del riesgo tromboembólico asociado. Aunque los fármacos anticoagulantes son eficaces para reducir este riesgo, no todos los pacientes pueden usarlos debido a contraindicaciones o problemas de hemorragias.
En la sesión general del Hospital Ruber Internacional, que se llevará a cabo el próximo 29 de mayo, el Dr. Eduardo Alegría, Médico Especialista en Cardiología Clínica e Intervencionista y Jefe de la Unidad de Cardiología Intervencionista, ofrecerá una conferencia sobre el cierre percutáneo de la orejuela izquierda, una intervención clave en el tratamiento de la fibrilación auricular y el riesgo de ictus asociado.
Las técnicas percutáneas son procedimientos médicos mínimamente invasivos que se realizan a través de la piel utilizando catéteres y otros instrumentos especializados. En el caso del cierre de la orejuela izquierda, se introduce un catéter a través de una vena, generalmente en la ingle o la pierna, y se guía hasta el corazón. Una vez en posición, se despliega un dispositivo de sellado en la orejuela izquierda para evitar la formación de coágulos y su paso a la circulación. Este procedimiento ofrece una alternativa segura y eficaz a los fármacos anticoagulantes, especialmente para aquellos pacientes que no pueden tolerarlos debido a hemorragias u otras contraindicaciones.
La eficacia de esta intervención es equivalente al tratamiento anticoagulante en la prevención de eventos trombóticos asociados a la fibrilación auricular, reduciendo significativamente la tasa de hemorragias. En tan solo una hora de intervención, se puede lograr una protección equivalente a la proporcionada por los anticoagulantes tomados diariamente de por vida.
La sesión es sin duda una oportunidad para profundizar en el conocimiento y las ventajas de este procedimiento que está transformando la vida de muchos pacientes con fibrilación auricular.