Enfermedades cardiovascularesEnfermedades cardiovasculares

Las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de mortalidad en todo el mundo y también en España según datos de la Fundación Española del Corazón y del Instituto Nacional de Estadística (INE). Desde infarto agudo de miocardio hasta accidentes cerebrovasculares, estas afecciones acaban con la vida de más de 20 millones de personas al año, una cifra que se estima que ascenderá hasta los 23 millones para el año 2030. Se trata de enfermedades que pueden tener consecuencias devastadoras para la salud y el bienestar de las personas pero que, en muchos casos son prevenibles.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 80% de los eventos cardiovasculares prematuros podrían evitarse controlando los factores de riesgo. Según la Dra. Laura Galian, corresponsable asistencial del Servicio de Cardiología del Hospital Quirónsalud Badalona, "realizar pequeños cambios en nuestros hábitos de vida puede reducir drásticamente el riesgo que tenemos de padecer un evento cardiovascular".

Factores de riesgo cardiovascular: ¿qué son y qué los causa?

Los factores de riesgo cardiovascular son aquellos que aumentan la probabilidad de desarrollar enfermedades del corazón y los vasos sanguíneos. Algunos de estos riesgos son inherentes, como la genética y la edad, pero otros están estrechamente relacionados con el estilo de vida y los hábitos diarios. Asimismo, "pese a que las enfermedades cardiovasculares suelen desarrollarse en la edad adulta, los factores de riesgo cardiovascular empiezan a estar presentes ya en la infancia, por lo que es importante adquirir hábitos saludables desde edades tempranas", destaca la Dra. Galian.


Entre los factores de riesgo más comunes se incluyen:

  • Hipertensión arterial: la presión arterial alta ejerce una tensión adicional en las arterias, lo que aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
  • Hiperlipidemia: niveles elevados de colesterol y triglicéridos en la sangre pueden provocar la aparición de placas en las arterias, dificultando el flujo sanguíneo y aumentando el riesgo de infarto y accidentes cerebrovasculares.
  • Tabaquismo: fumar daña los vasos sanguíneos y aumenta la formación de coágulos sanguíneos, lo que eleva significativamente el riesgo de infarto.
  • Diabetes: la diabetes mal controlada puede dañar los vasos sanguíneos y aumentar el riesgo sufrir una enfermedad cardiovascular.
  • Sedentarismo: la falta de actividad física regular está asociada con un mayor riesgo de obesidad, hipertensión y otros factores de riesgo cardiovascular.
  • Dieta poco saludable: consumir alimentos ricos en grasas saturadas, colesterol y sal puede contribuir al desarrollo de enfermedades cardiovasculares.

¿Cómo podemos prevenirlos?

"Hay tres puntos clave para la prevención: seguir una alimentación saludable, hacer ejercicio y dejar de fumar", afirma la especialista.


  • Seguir una alimentación saludable basada en la dieta mediterránea, con alimentos variados ricos en nutrientes como frutas, verdura, grano entero, proteínas magras y grasas saludables. Reducir el consumo de bebidas azucaradas y zumos de fruta, así como reducir al máximo el consumo de bebidas alcohólicas y de alimentos procesados.
  • Hacer ejercicio: tan solo caminando 4.000 pasos al día ya reducimos el riesgo de mortalidad por evento cardiovascular, según la Sociedad Española de Cardiología1. Por cada incremento de 1.000 pasos, el riesgo de reduce en un 15%1. Cambiar pequeños gestos cotidianos pueden ayudarnos a activarnos físicamente.
  • Dejar de fumar: es una cuestión imprescindible para cuidar el corazón. A los 2 años de dejar de fumar, el riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular se reduce sustancialmente, y sigue reduciéndose a medida que se incrementa el tiempo sin tabaco. Así, a los 15 años, el riesgo de sufrir una enfermedad cardiovascular va a ser el mismo que el de una persona que no ha fumado nunca, según estudios de la Amercia Heart Association2.

"Si bien algunos factores de riesgo cardiovascular, como la genética, no se pueden modificar, muchos otros están bajo nuestro control. La prevención juega un papel fundamental en la reducción del riesgo de enfermedades cardiovasculares y sus complicaciones", recuerda la Dra. Galian.

Asimismo, es importante también la realización de chequeos médicos regulares, puesto que permiten valuar el riesgo individual de desarrollar enfermedades cardíacas mediante la medición de factores de riesgo como la presión arterial, el colesterol, el índice de masa corporal (IMC) y la historia familiar de enfermedades cardíacas. Esta evaluación ayuda a tomar medidas preventivas para reducir el riesgo de problemas cardíacos en el futuro.


1Sociedad Española de Cardiología: https://secardiologia.es/blog/14481-cuantos-pasos-debemos-realizar-diariamente-para-disminuir-la-mortalidad-en-poblacion-general-cuanto-mas-mejor

2America Heart Association: https://www.heart.org/en/healthy-living/healthy-lifestyle/quit-smoking-tobacco/the-benefits-of-quitting-smoking-now